Investigadores canadienses aseguran que una prueba de evaluación estándar actual para detectar prediabetes en los niños con frecuencia no detecta la afección.
Irónicamente, los hallazgos provienen de un grupo de estudio conformado por 172 niños obesos de entre 5 y 17 años que se inscribieron en un programa para ayudar a alcanzar un peso saludable.
La prueba estándar de diabetes para los niños es la prueba de glucosa en el plasma (la sangre) en ayunas, pero identificó casi tres veces menos niños que la prueba de esfuerzo de glucosa, también llamada prueba oral de tolerancia a la glucosa. La prueba de esfuerzo de glucosa tarda más tiempo porque se toman muestras de sangre del paciente en ayunas y luego dos horas después de beber una solución azucarada.
Con la prueba de glucosa en ayunas, los investigadores hallaron que sólo el 8 por ciento de los niños del estudio cumplieron con los criterios de diagnóstico para la prediabetes. Pero la prueba de esfuerzo de glucosa indicó que el 25 por ciento de ellos tenía prediabetes.
"En una gran proporción de niños con prediabetes no se hubiera detectado la afección", aseguró en una declaración preparada la Dra. Katherine Morrison, del departamento de pediatría de la Universidad McMaster de Hamilton, Ontario, Canadá.
Los investigadores también hallaron que la prueba de glucosa en ayunas identificó el síndrome metabólico solo en el 5.2 por ciento de los niños, mientras que la prueba de esfuerzo de glucosa lo detectó en el 12.8 por ciento de ellos. El síndrome metabólico es un conjunto de factores de riesgo (como la hiperglucemia) para la diabetes y la enfermedad cardiaca.
Los hallazgos debieron presentarse durante el fin de semana en la reunión anual de la Endocrine Society en San Francisco.
"La prediabetes y el síndrome metabólico son comunes en los niños obesos, pero no se identifican fácilmente con la prueba que se recomienda actualmente. Exigen una prueba de esfuerzo de glucosa", señaló Morrison.
La prediabetes y el síndrome metabólico con frecuencia no causan síntomas obvios, agregó. La detección precoz es importante porque los cambios en la dieta, el ejercicio regular y la pérdida moderada de peso pueden prevenir o retrasar o prevenir la diabetes y el síndrome metabólico.
El tiempo necesario, la inconveniencia y el costo se encuentran entre las razones por las que las pruebas de esfuerzo de glucosa no se usan generalmente en los niños.
"Sin embargo, esta investigación sugiere que la prueba recomendada para evaluar a niños obesos para detectar prediabetes y síndrome metabólico se debe cambiar", aseguró Morrison.