Si se usan según las indicaciones del pediatra, los medicamentos de venta libre para la tos y el resfrío son muy seguros para los niños.
Un estudio publicado en Annals of Emergency Medicine revela que las muertes que se producen generalmente son en menores de 2 años y por una sobredosis.
"Los productos para la tos y el resfrío suelen estar esporádicamente asociados con una toxicidad grave y con la muerte en niños", escribió el equipo del doctor Richard C. Dart, de la Escuela de Medicina de la University of Colorado.
En el 2005, se registraron 64.658 casos de envenenamiento asociado con esos fármacos; 28 fueron graves o fatales.
Un panel de expertos analizó los factores asociados con el consumo de remedios para el resfrío o la tos que producen esas fatalidades en menores de 12 años.
Tras estudiar 178 casos fatales, el panel concluyó que la relación entre un ingrediente contra la tos y el resfrío y la fatalidad podría aplicarse a por lo menos 118 casos.
En 82 casos se había usado un solo fármaco sin prescripción; en 21 casos, el niño había ingerido un fármaco sin prescripción y otro recetado, y en 15 casos, sólo se había usado un fármaco de venta bajo receta.
Los investigadores precisaron que en los 103 casos tratados con fármacos sin receta, los ingredientes más comunes fueron pseudoefedrina, difenhidramina y dextrometorfano. Ochenta y ocho de esos casos se atribuyeron a una sobredosis.
"La intención de los cuidadores habría sido terapéutica para aliviar síntomas en algunos casos y no terapéutica en otros, ya sea para inducir la sedación en los niños o como una forma de maltrato", informaron los autores.
Se identificaron varios factores promotores, como la edad menor de 2 años, el uso de medicamentos para sedar a los niños, la administración de fármacos en centros de cuidado diurno o el hogar de la niñera, el uso de dos medicamentos con el mismo ingrediente, la falta de uso de un dispositivo de medición, la identificación errónea del producto y el uso de un producto para adultos.
"Muchos de los factores asociados con la administración no intencional de una sobredosis que identificó el panel de expertos se pueden prevenir y las intervenciones podrían reducir significativamente la mortalidad relacionada con los remedios para la tos y el resfrío", explicó el equipo.
"Una intervención de salud pública exitosa demanda una clara identificación de los factores promotores de este problema, la puesta en práctica de herramientas efectivas para controlar cada factor y una vigilancia activa continua para documentar el efecto de las intervenciones y detectar nuevos factores", agregaron los autores.