lunes, 10 de septiembre de 2007

ENEMIGOS DE LA LACTANCIA

¿Cuántas veces has escuchado que una mamá no produjo leche o que se le secó?

Para el pediatra neonatólogo José Alfonso Gutiérrez Padilla, profesor investigador de Pediatría de la Universidad de Guadalajara, la mayoría de los dimes y diretes que rodean a la lactancia materna son enemigos silenciosos que van mermando los programas de salud a nivel mundial.

La Unicef estima que aumentar la práctica de la lactancia podría salvar anualmente alrededor de 1.5 millones de niños, mientras que la Organización Mundial de la Salud, en su publicación Healthy Eating during Pregnancy and Breastfeeding, refiere que por lo menos en los primeros seis meses de vida, la leche materna debe ser el único alimento del bebé.

"Aparte de nutrimentos y de anticuerpos, produce un factor de estimulación cerebral, entonces los hijos de las mamás que lactaron cumplen más rápido sus metas escolares a lo largo de toda la vida", dice.

Aunque no exista un producto que supla a la leche de mamá, ¿qué pasa si ella no puede producirla?

"Hace 50 años que no había fórmula ni intereses comerciales, todas las mamás tenían que producir leche o recurrir a una nodriza", señala.

El especialista aclara que la única forma de generar más leche es que el bebé succione directamente del pecho.

Pero, la cuestión psicológica puede influir negativamente en esta obra de la naturaleza; existen mamás que dicen que "no les va a salir" antes de que nazca, y como se programan, no la producen.

Gutiérrez Padilla explica que la hormona que produce la leche es la prolactina, la cual es bloqueada por altos niveles de adrenalina, conocida como la hormona de la angustia, el estrés y la ansiedad. Por ello, existen bases científicas para decir que se les "secó la leche" si entraron en un periodo de estrés o ansiedad.

"Todas las mamás tienen una depresión postparto leve o regular, y algunas muy profunda, y ahí es cuando puede escasear la leche", dice el médico, pero alienta a las mamás a no dejar de amamantar.

Las únicas mamás que no pueden dar pecho a sus hijos son las que tienen hepatitis B o C, sida, tuberculosis, infecciones avanzadas y que hayan sido sometidas a cirugías o tengan prótesis. Eso de la cerveza es un mito A la mamá siempre le lloverán sugerencias para producir más leche, pero no todas son ciertas. Sobre consumir cerveza, el pediatra neonatólogo José Alfonso Gutiérrez Padilla, señala que aunque otorga una sensación de placer y desinhibición es una práctica nada recomendable.

"Cualquier tipo de alcohol está prohibido. No se debe beber porque si para una mamá es poca cantidad, para un bebé es altísima y puede ocasionarle depresión, asfixia o baja de oxígeno por el alcohol", afirma. lactancia materna, mipediatra, mupr5301272wa

Reportaje de Areli Avila publicado en Reforma