martes, 31 de marzo de 2009

LA MAYORÍA DE LOS ADOLESCENTES NO RECIBE ATENCIÓN PREVENTIVA DE SALUD

Un estudio encontró que casi las dos terceras partes carecieron de este tipo de servicio en el año anterior

La mayoría de los adolescentes no reciben la cantidad apropiada de servicios preventivos de salud, aunque este tipo de atención puede establecer buenas conductas de salud y disuadirlos de conductas que puedan afectar a los adolescentes durante el resto de sus vidas, según encuentra un estudio reciente.

Investigadores de la Universidad de California en San Francisco analizaron datos recolectados de casi 8,500 adolescentes entre los 10 y los 17 años de edad que participaron en la Encuesta de gastos médicos, una encuesta nacional de familias y proveedores médicos. El equipo de la UCSF se enfocó en varios aspectos de la atención preventiva para los adolescentes, entre ellos cuánta atención habían recibido durante el año anterior, si habían recibido asesoría sobre varios temas de salud, y si habían pasado tiempo solos con su proveedor de atención de salud.

El estudio halló que apenas el 38 por ciento de los jóvenes había tenido una cita preventiva de salud en el año anterior.

"Los resultados nos sorprendieron bastante. Con tantos adolescentes que no reciben la atención preventiva recomendada, está claro que necesitamos desarrollar nuevas estrategias que ayuden a aumentar la entrega de servicios", afirmó en un comunicado de prensa de la UCSF el Dr. Charles Irwin, primer autor del estudio y director de la División de medicina adolescente del Hospital Pediátrico de la universidad.

Irwin y colegas también examinaron qué tanto los médicos aconsejaban a adolescentes y padres sobre seis temas específicos de salud preventiva: la atención dental, una alimentación sana, el ejercicio regular, usar cinturón de seguridad, usar casco al montar en bicicleta, y la exposición al humo de segunda mano. Menos de la mitad de los adolescentes que tuvieron una cita preventiva de salud recibió consejos sobre al menos uno de estos temas y apenas al diez por ciento se les aconsejó sobre los seis.

"Realmente necesitamos animar a los médicos a hacer una rutina de este tipo de asesoría. De otra manera, podríamos perder una oportunidad de hacer una diferencia en las vidas de estos niños", apuntó en el comunicado de prensa la autora principal del estudio, Sally Adams, especialista de la División de medicina adolescente de la UCSF.

Los ingresos familiares y la situación de aseguramiento pueden afectar la cantidad de atención preventiva recibida por los adolescentes. El 48 por ciento de los de familias de altos ingresos tuvieron una cita preventiva el año pasado, frente a 36 por ciento de los de familias de ingresos medios y 32 por ciento de los de familias de bajos ingresos. Fue más probable que los adolescentes que tenían seguro privado hubieran recibido atención preventiva en el año anterior que los que contaban con seguro público o no tenían seguro.

"Los profesionales de atención de salud deben continuar exigiendo programas que aumenten el número de adolescentes que tienen seguro, porque el seguro es clave para obtener acceso a la atención preventiva", afirmó Adams.

El estudio fue publicado en línea el 30 de marzo en la revista Pediatrics.