sábado, 15 de marzo de 2008

LOS ADOLESCENTES PASAN DEMASIADO TIEMPO FRENTE A UNA PANTALLA.

Un estudio halla que las adolescentes de áreas empobrecidas son las más propensas a ver la televisión o a usar computadoras

Una nueva encuesta informa que los adolescentes pasan demasiadas horas frente a la televisión y las computadoras, y los que viven en los barrios más pobres pasan aún más tiempo "frente a la pantalla".

"El mensaje es que debemos determinar por qué algunos de estos niños no tienen alternativas más saludables en sus barrios", dijo la autora del estudio, Tracie A. Barnett, investigadora del Centro de investigación del Hospital infantil Sainte-Justine de Montreal.

Aunque es posible que los niños pasen tiempo en sus casas viendo documentales por televisión y leyendo con atención novelas clásicas en sus computadoras, los investigadores asumen que no están ejercitando sus cerebros ni sus cuerpos. Algunos estudios han sugerido una relación entre ver televisión y la obesidad en los niños, anotó Barnett.

De hecho, un estudio publicado a principios de este mes informó que recortar el tiempo de televisión y de computadora a la mitad ayudó a que los niños pequeños comieran menos y perdieran peso.

Para descifrar lo que los adolescentes hacían en su tiempo libre, Barnett y sus colegas entrevistaron a 1,293 estudiantes de séptimo grado de diez escuelas secundarias de Montreal en 1999 y dieron seguimiento a muchos de ellos durante cinco años.

Los estudiantes informaron sobre la cantidad de horas que pasaban frente a la televisión, usando videojuegos o usando la computadora. Se espera que los hallazgos fueran presentados el miércoles en la Conferencia anual sobre prevención y epidemiología de la enfermedad cardiovascular de la American Heart Associations en Colorado Springs, Colorado.

La mitad de los adolescentes y la mitad de las adolescentes informó que pasaba un promedio de más de 42 horas a la semana frente a una pantalla electrónica. La televisión era la forma más común de pasar tiempo frente a una pantalla, pues fue la opción elegida en el 85 por ciento de las veces.

Las adolescentes que vivían en las áreas más empobrecidas eran cinco veces más propensas a pasar la mayor parte de su tiempo frente a una pantalla que las de los barrios más ricos.

Las adolescentes de los barrios pobres "podrían ser más vulnerables a la percepción de que su vecindario no es seguro", sugirió Barnett. "Es posible que los chicos adolescentes se vean un poco menos afectados y decidan salir a la calle de todas formas".

Una investigación futura intentará determinar por qué hay una relación entre pobreza y el tiempo frente a una pantalla, dijo Barnett.

Frederick Zimmerman, profesor adjunto de los servicios de salud del Instituto de investigación del Children's Hospital de Seattle y de la Universidad de Washington, dijo que los padres de las zonas empobrecidas se enfrentan a decisiones difíciles entre permitir a sus hijos salir a la calle, algo que puede ser peligroso, o dejarlos frente a una pantalla pero en casa.

"Los padres, sobre todo los de barrios de bajos ingresos, enfrentan una situación desesperante al tener que elegir entre los peligros del exterior y los que resultan de pasar mucho tiempo frente a la televisión o a la computadora", apuntó Zimmerman. "Algunas veces, resulta tentador creer que los peligros que se derivan de ver mucha televisión o de usar la computadora no son reales, pero sí lo son", dijo. "Varios estudios han documentado las relaciones entre ver televisión en exceso y la obesidad, fumar, beber alcohol, las conductas violentas y agresivas, la tolerancia a la agresión contra las mujeres y el mal rendimiento escolar".

Publicado en MedlinePlus